La calle Bretón de los Herreros, bordea la parte sur/oeste del casco histórico de Logroño, presentando una irregularidad de manzanas en cuanto tipología, usos, alturas de edificios (baja + 4 a baja + 10 alturas), con variedad de estilos arquitectónicos.

La propuesta se inicia con aprobación de la modificación puntual aumentándose las alturas de planta baja + 4 a planta baja + 6, reduciéndose el fondo edificable propuesto del Plan General de Ordenación de Logroño, de 30 m. a 14,40 m. sin aumento de aprovechamiento urbanístico. Obteniendo:

• Una mejora de la integración con los edificios colindantes (Bretón de los Herreros 21 de planta baja + 4 y Bretón de los Herreros nº 27 de planta baja + 8).
• Una reducción del impacto visual de las medianeras.
• Una regularización de alturas de cornisas.
• Un incrementar el espacio libre interior de las parcelas (patio) para beneficio de la propia parcela y de bloques contiguos y opuestos en Avda. de Portugal.

En cuanto al diseño arquitectónico, aunque se propone un único edificio, pretende mantenerse la fragmentación del frontal del parcelario original, simulando dos fachadas con composiciones del entorno, simétricas a su vez, siendo una para el nº 23 y otra para el nº 25.

Para el número 23, se proponen cambios compositivos para las dos últimas plantas que faciliten la conexión con el edificio anexo, que es de cuatro alturas, retranqueándose la última planta. Y para el número 25, se remata la última planta con un balcón corrido.

A su vez, se pretende reducir la carga ornamental de las fachadas evitando símiles historicistas, dada la mezcla de estilos que hay a lo largo de la calle, planteándose un estilo más actual que huya de los excesos. El elemento representativo, es la incorporación de unas celosías correderas que además de permitir a los usuarios romper con la simetría propia de los edificios, permite crear mayor intimidad en el interior de las viviendas.